EFIGIE DE UNA MUJER EXCEPCIONAL1
por Mahfud Massís
Escritas sobre grandes
guirnaldas de aluminio,
mientras volaba sobre el Continente, recibimos, hace años, ciertas cartas de Winétt.2 Su tono familiar, exacerbando
el colorido esencial de su índole,
sumergíase en las tierras del Gran Almirante, de cuyo centro una cabeza de ópalo
impartía los principios de una expresión hecha
a relámpagos,
a piedra, a mineral sombrío.
Eran pulpa, sangre y material
de arquitectura, verbo, aguardando la libertad y el
orden, la mano de fiera seda, buscando
el borde de los caminos y los acantilados.
Lenguaje de agrias hechuras, pero dulce; lengua de hoy, pero de un ayer evocador
y adolescente; lengua donde los viejos ramajes
sumergidos en las urnas de antaño, florecerán más tarde como la flor del carbón, con ala roja, pero inmóvil,
cuando, entre cortinajes escarlatas, asome la diestra
del artesano prodigioso, y los dedos comiencen a repujar la vieja y dura plata; y el herrero clave sus clavos de oro en la herradura
marcial
de la cabalgadura misteriosa, sobre cuya montura vuelan, aferrados, hombres de rostro
desconocido; y el ebanista ascienda con la cabeza oscurecida por arcanas mixturas;
y el escultor, y el mago, y el extraordinario vesánico, negro y frío, que duermen, todos
juntos,
en el grande artista, y que en Winétt se unen a un lejano sentimiento de señorío, vivo
en el subconsciente de esta mujer de organización patricia.
Dejemos en la penumbra
-toda gestación tiene su noche- la metamorfosis de aquella
marea alucinante. Desde los subterráneos y oscuros fosos,
desde el corazón de las sombras,
desde el ocaso mismo de la vida, el poema irrumpe, se levanta, se extiende, y "El Valle Pierde su Atmósfera."
Poema de largura y de profundidad, biselado, puro e impuro, humano, sobrehumano,
helado
de
superficie, pero
de
lecho
hirviente;
aroma
y veneno,
cántico,
respondo, ¡América! Ángel de verde cornamenta,
nueva Cipango coronada de joyas,
mendicante. ¡Cuán difícil entrar en los flancos sanguíneos de este friso verbal, condicionado por ímpetus heterogéneos, herido de sensibilidad resonante e impulsado por una afectividad fina, demasiado invisible al consenso de una crítica estética distraída
y de dolosa erudición!
Nosotros percibimos el ruido de sus cadenas, sonando
con el ritmo sombrío de los
esclavos, o el galope del bagual sobre la inmensa
llanura; los encendidos cocodrilos místicos,
con sus cuerpos labrados a orillas de los ríos; y sobre un prisma de ajenjo y joyería,
un animal sagrado, bárbaro, ornamental, de cuya garganta
surge un himno yodado, sacudiendo su cola sobre los abismos.
Es el emblema
del CANTO NUEVO, trabajando con la técnica de Tubal, el forjador
de espadas.
Es
la voz de Eva, acuchillada, en el herraje social de los desamparados y oprimidos.
Voz de derrota y de victoria,
sol y pantano sobre la tierra.
Y desde ella misma, desde abajo del alma, se desplazan, como hecho de fondo, los materiales de oposición que integran su textura humana,
desarrollándose, en una dualidad encadenada, hacia una periferia
trágica, donde hasta la pasión sostiene su dibujo
delicado, bajo el conjunto de una femineidad trascendental y eterna.
Digámoslo: ninguna mujer, en lo alto y en lo ancho de la poesía contemporánea, combina tan vívido,
tenso y multicolor registro, donde lo angular
y lo evanescente, lo polvoroso y marmóreo, embellecidos de unidad, ascienden libremente hacia lo absoluto.
Y por encima
de todo, una suerte de lenguaje
de antigua heráldica, un conocimiento esencial del pasado, como extraña sabiduría
crepuscular oscila entre el lujo y el polvo, atados a las primeras instancias de la memoria, pero imantados, abstraídos, estilizados,
en una especie de resurrección, que extiende sus antenas de oro hacia los sumergidos
signos del futuro...
1 En: SYD, p. XXIX-XXXI, donde consigna haber aparecido en Las últimas
noticias, 1951, sin más datos; Memoria Chilena consigna su publicación en la revista Polémica. Santiago
: [s.n.], 1963.
1 vol., n° 10, agosto
de 1954, www.memoriachilena.cl/mchilena01/temas/documento_detalle.asp?id=MC0017649
2 Sin
tilde en todo el texto.
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